Rosquillas de Naranja

Buenos y fríos días!!

En Miraflores ya tenemos nieve para todos!! y vaya frío que hace! Por eso el mejor plan que tenemos para esas tardes que está haciendo, es ponernos a trastear en la cocina para hacer una buena merendola.

Y eso es lo que hicimos este fin de semana!!

Normalmente, pienso las recetas que vamos a publicar antes de hacerlas. Pero hay días, en los que abro la despensa con ganas de algo dulce, y dependiendo de los ingredientes que tenga a mano, pues eso es lo que preparo.

Así que haciendo cábalas y memoria... hoy os traigo unas riquísimas ROSQUILLAS DE NARANJA!!

En la pastelería hacíamos las típicas rosquillas fritas, que gustaban mucho, pero hoy les vamos a dar un toque más original con la naranja.

Estos son los ingredientes que vamos a utilizar, para unas 20-25 rosquillas:

• 550 gramos de harina,
• 150 ml de aceite de girasol,
• 100 gramos de azúcar,
• 2 huevos
• Zumo de 2 naranjas y la ralladura de 1,
• 1 sobre de gasificante (que son 2),
• 10 gramos de levadura o impulsor.

Antes de comenzar, un inciso. El gasificante, lo venden como tal en los supermercados. Normalmente, son sobres de dos colores, uno blanco y uno azul o punteado. Cuando me refiero a uno, me refiero a los dos, que son complementarios. Sireve para añadir gas, que en nuestro caso se traduce en esponjosidad.

Ahora sí, a la receta.

En un recipiente, ponemos el zumo de las dos naranjas con los huevos y mezclamos. Añadimos la levadura y los sobres de gasificante, y volvemos a mezclar. Incorporamos el azúcar, el aceite y por último la harina, mezclando todo bien hasta que quede una masa homogénea.

Tapamos con un trapo y dejamos reposar a temperatura ambiente 30 minutos.

Transcurrido el tiempo, ponemos a calentar una olla o sartén con aceite, para freir. Tiene que ser profunda, para que las rosquillas no toquen el fondo.

En una superficie enharinada, amasamos un poco la mezcla, y vamos haciendo las rosquillas, que vamos dejando en una bandeja sobre papel de hornear para que no se peguen.

Con el aceite bien caliente, cogemos una rosquilla y la echamos en la sartén o cacerola. Más o menos, un par de minutos por cada lado, hasta que esté bien doradita, y sacamos sobre un papel de cocina para que escurra.

Con la rosquilla aún caliente, rebozamos en una mezcla de azúcar y canela.

Esperamos a que se enfríen... y a merendar!!!

Habéis visto qué sencillo??

Sé que a muchos no os gustan las cosas fritas, con los Donuts muchos querían una receta para el horno, pero os prometo que no están nada grasientas, absorben muy poco aceite y luego lo sueltan en el papel. 

Hacedme caso y probadlas!! Son muy suaves y jugosas!!

Un abrazo, y hasta la receta que viene!!