Secretos de Pastelero: Trufas rellenas

Buenos días!!

Lo primero de todo... Feliz Año Nuevo!! Es que llevamos un montón desaparecidos!!

Quisimos seguir publicando en Navidades, pero al final los pedidos hicieron que no tuviéramos tiempo... el "inconveniente" de ser pocos!! Pero ojalá se repita muchas veces!!

Dejamos la promesa del postre de Nochebuena... llega un poco tarde, pero os sirve para cualquier ocasión!!

Eso sí, pedimos perdón por anticipado de las fotos... mira que les hemos pedido a los Reyes que nos enseñaran cómo hacerlas mejor... pero de momento viene con retraso... ;)

Por lo menos intentaremos explicarlo lo suficientemente claro para que lo entendáis... Aunque bueno, ya sabéis que todas nuestras recetas son sencillas y muy exitosas!!

Ah!! que no os hemos dicho lo que es... Hoy vamos a hacer TRUFAS RELLENAS!!

Y diréis, ¿¿ rellenas de qué ?? Pues de más trufa!!! Sabéis que somos muy chocolateros...

Los ingredientes que vamos a necesitar son:

500 ml de nata para montar, bien fría y mínimo 35% de Materia Grasa.
100 gramos de azúcar.
80-100 gramos de cacao en polvo, para la trufa, y algo más para rebozar.
Cobertura de chocolate
Chorrito de licor (ron, brandy, whiskey...) - Opcional

Lo primero de todo, vamos a montar la trufa.

Con la ayuda de un robot o varillas eléctricas, ponemos a batir la nata, bien fría, con el azúcar. Cuando ya haya montado, añadimos el cacao poco a poco. Os pongo la cantidad aproximada, dependiendo de cómo os guste de "chocolateada" la trufa.

Como esta parte va a ser el relleno, podéis añadir un chorrito del licor que más os guste, para darle un toque diferente. Con un poquito basta, es sólo para dar un poco de sabor, y es algo opcional.

Cuanto tengamos la trufa lista, la introducimos en una manga pastelera con una boquilla lisa, y en un papel de hornear vamos haciendo bolitas o pegotitos.

Con las cantidades indicadas os pueden salir alrededor de unas 35 trufas de tamaño medio, para que calculéis las que necesitáis.

Una vez listo, introducimos en el congelador, mínimo 2 o 3 horas. (Este paso, es mejor hacerlo el día de antes, así la trufa está bien congelada).

Una vez congeladas, ponemos a derretir la cobertura de chocolate. Lo podéis hacer al baño María o en el microondas, con cuidado de que no se queme.

Pondríamos un recipiente con la cobertura derretida y al lado un platito con cacao en polvo.

Sacamos las trufas del congelador, pero no todas de golpe, de tres en tres o por ahí.

Introducimos la trufa congelada en la cobertura, con la ayuda de unos palillos o un tenedor con las púas de fuera, dejamos que escurra y seque un poco, y rebozamos en el cacao en polvo.